Un motor DC es un motor de corriente continua. El conmutador y las escobillas, uno de sus componentes principales, son la clave para el buen funcionamiento del motor. La coordinación precisa entre ellos garantiza que el motor pueda funcionar de forma continua y eficiente.
El conmutador es un dispositivo de precisión dentro de un motor de CC. Tiene un diseño exquisito y es potente. A medida que el motor gira, los múltiples segmentos del conmutador hacen contacto a su vez con las escobillas. Este proceso dinámico realiza el cambio periódico de la dirección de la corriente en el devanado del inducido. Este cambio se basa en el principio básico del electromagnetismo, es decir, la corriente está sometida a una fuerza en el campo magnético y la dirección de la fuerza depende de la relación de dirección entre la corriente y el campo magnético. Mediante la acción del conmutador se puede ajustar la dirección de la corriente en el tiempo, asegurando así que la armadura esté siempre sometida a la fuerza que la impulsa a girar en el campo magnético, realizando la rotación continua del motor.
Como puente que conecta la fuente de alimentación y el devanado del inducido, la importancia de las escobillas es evidente. Están fabricados con materiales altamente conductores y resistentes al desgaste, como grafito o compuestos de cobre y grafito, para garantizar una buena conductividad y estabilidad en condiciones de rotación a alta velocidad y contacto frecuente. Las escobillas mantienen un estrecho contacto con el conmutador a través de resortes u otros dispositivos elásticos, transmitiendo de manera estable la potencia de CC en la fuente de alimentación al devanado del inducido giratorio. Al mismo tiempo, las escobillas también asumen una cierta función de soporte mecánico, asegurando que el conmutador no resulte dañado por la fuerza centrífuga o la vibración al girar a alta velocidad.
El trabajo coordinado del conmutador y las escobillas es la clave para el funcionamiento estable y eficiente del motor de CC. La coordinación precisa entre ellos no solo garantiza el cambio oportuno de la dirección actual, sino que también garantiza el funcionamiento estable del motor en diversas condiciones de trabajo.